El yoga es una práctica con varios beneficios físicos y mentales, se utiliza como herramienta de relajación y para conseguir una mejor comprensión de nosotros mismos. El origen del yoga se remonta a la antigua India y actualmente se practica en todo el mundo. Las posturas que se practican durante una sesión de yoga tienen como objetivo mejorar la forma física, desarrollar el enfoque y la concentración, aliviar el estrés y la ansiedad, y mejorar el bienestar general.
Este artículo explorará las 20 posturas de yoga principales que pueden mejorar significativamente tu salud física y mental:
1. Postura de la Montaña (Tadasana)<br Postura de la Montaña (Tadasana)
Esta postura ayuda a mejorar la postura, aliviar la tensión y aumentar la conciencia corporal. Para realizar esta postura, ponte derecho sobre los pies y junta las palmas de las manos delante del pecho. Mantén el cuello y los hombros relajados y la columna recta.
2. Postura del Niño (Balasana)
Esta postura es reconstituyente y calmante, perfecta para principiantes. Coloca las rodillas en el suelo y siéntate sobre los talones. Inclínate hacia delante y estira los brazos hacia delante, con la frente tocando la esterilla.
3. Perro Boca Abajo (Adho Mukha Svanasana)
Esta postura fortalece los brazos, los hombros y las piernas, al tiempo que estira la columna vertebral. Para empezar, coloca las manos y los pies en el suelo. Sube las caderas hacia el techo, formando un triángulo con el cuerpo.
4. Postura del Árbol (Vrikshasana)
Esta postura de equilibrio desarrolla la estabilidad mental, la concentración y fortalece las piernas. Ponte sobre un pie, levanta el otro y colócalo al lado de la rodilla. Lleva las palmas de las manos al centro del pecho y concéntrate en un punto.
5. Esta postura mejora la fuerza del tronco y la parte superior del cuerpo. Empieza en posición de flexión de brazos, mantén el cuerpo recto y aguanta unos segundos.
6. Guerrero I (Virabhadrasana I)
Esta postura mejora la fuerza de la parte inferior del cuerpo y desarrolla el equilibrio. Para ejecutarla, empieza en la Postura de la Montaña. Echa el pie izquierdo hacia atrás, dobla la rodilla derecha y levanta los brazos por encima de la cabeza para formar una línea recta.
7. Guerrero II (Virabhadrasana II)
Esta postura fortalece las piernas, los hombros y estira las caderas. Empieza de pie en la postura de la Montaña, echa el pie izquierdo hacia atrás y dobla la rodilla derecha. Gira la cabeza para mirar por encima de la mano derecha.
8. Postura de la Cobra (Bhujangasana)
Esta postura fortalece la espalda, mejora la postura y la flexibilidad de la columna. Túmbate boca abajo con las palmas de las manos cerca del pecho. Inhala y levanta el pecho del suelo, manteniendo las rodillas, las caderas y los pies en contacto con la esterilla.
9. Postura del Pez (Matsyasana). Postura del pez (Matsyasana)
La postura del pez estira el cuello y la columna vertebral y abre el pecho. Túmbate con los brazos a los lados. Levanta el pecho e inclina la cabeza hacia atrás. Postura de la vaca y el gato (Marjaryasana-Bitilasana)
Ésta es una postura de yoga calmante que mejora la flexibilidad de la columna vertebral. Empieza a cuatro patas, exhala arqueando la columna y metiendo la barbilla hacia el pecho. Inhala, abre el pecho y levanta la cabeza. Postura del Triángulo Extendido (Utthita Trikonasana)
Esta postura es excelente para mejorar el equilibrio, estirar las caderas y fortalecer la parte inferior del cuerpo. De pie, con los pies separados, extiende un brazo hacia abajo hasta tocarte el tobillo y el otro hacia arriba, hacia el techo.
12. Postura del Puente (Setu Bandhasana) Esta postura mejora la fuerza del tronco y la flexibilidad de la columna vertebral. Túmbate en la esterilla con las rodillas flexionadas y los pies en el suelo. Levanta las caderas hacia el techo manteniendo los omóplatos en el suelo. Flexión sentada hacia delante (Paschimottanasana)
Esta postura calmante aumenta la flexibilidad de los isquiotibiales, alarga la columna y mejora la digestión. Siéntate con las piernas estiradas delante de ti e inspira. Estira los brazos hacia delante para agarrarte los pies y exhala.
14. Postura de la Mariposa (Baddha Konasana)
Esta postura mejora la flexibilidad de las caderas y la ingle, y alivia las molestias menstruales. Siéntate con los pies juntos, las rodillas hacia fuera, luego siéntate erguida y agita las rodillas hacia arriba y hacia abajo.
15. Postura del cadáver (Savasana)
Es una postura de relajación y ayuda a reducir el estrés y la ansiedad. Túmbate boca arriba, con las palmas de las manos hacia arriba y los brazos a los lados. Esta es una postura de yoga reconstituyente que estira las caderas, la ingle y los muslos. Túmbate y apoya la espalda en almohadas o mantas. Junta las plantas de los pies y deja que las rodillas caigan hacia los lados. Flexión hacia delante de pie (Uttanasana)
Esta postura calma la mente y estira los isquiotibiales. Colócate de pie con los pies separados a la anchura de las caderas y estira los brazos hacia los dedos de los pies.
18. Postura de la Paloma (Eka Pada Rajakapotasana)
Esta postura es excelente para estirar las caderas y mejora su movilidad. Empieza en la postura del Perro Boca Abajo, levanta una pierna y llévala a la parte delantera de la esterilla. Coloca el pie delantero cerca de la ingle y estira la otra pierna detrás de ti.
19. Postura del Águila (Garudasana) Postura del Águila (Garudasana)
Esta postura mejora el equilibrio, la fuerza y la intensidad de la concentración. Empieza de pie en la Postura de la Montaña, levanta la pierna izquierda y crúzala sobre la derecha. Dobla las rodillas y cruza los brazos delante de ti. Postura del Loto (Padmasana)
Esta postura sentada se utiliza para la práctica de la meditación y mejora la claridad mental. Cruza las piernas y coloca los pies sobre las rodillas opuestas. Mantén la columna vertebral erguida y las palmas de las manos hacia arriba.
Conclusión
Practicar yoga es una forma estupenda de mejorar el bienestar físico y mental. Practicando con regularidad las 20 posturas de yoga mencionadas en este artículo, puedes conseguir una mayor concentración y fuerza física, a la vez que alivias el estrés. Empieza despacio y tómate tu tiempo para dominar cada postura. Asegúrate de respirar profundamente y de concentrarte en tu práctica para cosechar todos los beneficios.